Son, desde ahora, portadores del Espíritu Santo, gracias a la imposición de las manos del Obispo y a la unción con el Santo Crisma.
Tal y como os recordó D. César, poned esos dones que habéis recibido al servicio de la sociedad y de la Iglesia.
Enhorabuena a vosotros y a vuestras familias.
No hay comentarios:
Publicar un comentario